La empresa Disfarma informó que terminó de manera unilateral el contrato con Nueva EPS para la dispensación de medicamentos, haciendo uso del término de preaviso de 60 días hábiles. La medida, que afecta a 2,4 millones de usuarios y 232 puntos de atención, se tomó tras varios intentos de diálogo sin respuesta efectiva por parte de la Entidad promotora de salud.
Disfarma alegó que la decisión obedece a la “insostenibilidad operativa y financiera” debido al flujo insuficiente de recursos y al incumplimiento en los pagos por parte de la Nueva EPS. La empresa agregó que la decisión fue notificada a la Superintendencia de Salud y solicitó una intervención para resolver la situación y garantizar la continuidad del servicio a los usuarios.


